martes, 19 de julio de 2011

CORAZON DE PAPEL


Soy un corazón de un simple mortal, siento, sufro y muchas veces suelo llorar, en ocasiones la verdad me suele envenenar, el tango me acuerda de rencores y penas que un día se pudo tener, un azote en el alma me empuja a correr, vivo amando sin poder entender, un eclipse me habla de su nuevo despertar, me muevo despacio para llegar al umbral, los sentimientos trato de ignorar, el mundo a mi puerta viene a golpear, sin reproches, sin el gran dolor, bajo los peldaños y te vuelvo a mirar, allí están, mirando sobre la nariz, es la vida que parece gritar, deja el tiempo correr, me dice que deje ya de bailar, pueden haber tiempos de soledades o quizás sea preferible reír, se me cae un zapato y miro el reloj, quizás vengan tiempos mejores, no sé si distantes de mí, ya da todo igual, soy un simple corazón, estoy sin nada en este espacio universal, muchas veces quisiera de papel poder ser, frío e impersonal, que solo pudiera grabar y nunca pudiera sentir, estar en el interior como un fantasma y nada más, quizás como un poeta en algún momento pudiera escribir, te diría que te quiero, te amo, aunque sienta el dolor, total seria de papel, amontonaría sentimientos y cariños a montones, la vida es así, muchas veces parece que se puede sangrar, pero no se puede olvidar, con disimulo podría mirar, y nada me podría afectar, quizás cuando el alma me pida hablar, yo simplemente la podría ignorar, de sobras sabría que ni la rabia ni el dolor me podrían inmutar, daría mil besos sin una gran preocupación, dormiría con todas ustedes, como un gran gato perdido en un pañuelo del gran familiar, la noche te podría mostrar, y el baile lo disfrutaríamos con una gran orquesta, con un café en la mano tal vez reiría, total un gran corazón de papel yo seria, me envenenaría de caricias y viento invernal, el amor de las manzanas caería como el abrigo de un camino que ni tu ni yo caminaríamos. Como quisiera ser un corazón de papel, no jugaría a la suerte del prójimo, escribiría sin saber si estas por allí, podría mirar al mundo como se jode a los que no están, vería desafiante como esas señoras buscan a sus caballeros andantes que no existen más, el piano y sus melodías me acompañarían mientras busco ese mundo que pareciera no estar, no está ella, no está el, ni tampoco los demás, uno cree de pronto que la venta de boletos es para todos igual, te dan ganas de llorar, se vive luchando y detrás de la puerta están las hojas muertas, el viento las arrastra de aquí o allá, parece que es una hermosa ilusión , pero no siempre es así, la vida es verdad y mentira también, gorriones presos y gavilanes risueños, guitarra y también canción, una luz de sábado o quizás de domingo, una ilusión que vivo sin pensar quien soy. Las claras tardes de un corazón real, no son las mismas que las de un corazón de papel, podemos parecer iguales, pero no es así, en un pedazo de cielo se puede repartir amor y también odio infernal, esos son secretos que podemos compartir, pero lo que sentimos nunca podrá ser igual, desnudos quizás nos puedan confundir, incluso cuando dejemos de respirar, el sueño puede parecernos igual, pero lo que puede sentir un corazón real, es fuerte y el dolor te puede matar, por eso en ocasiones preferiría sentir lo que siente un corazón de papel.
Adonis Palomar.

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