INSATISFECHOS DE LA VIDA

Muchos están cansados de escuchar, leer o de ver, tanta incoherencia en la vida cotidiana, mencionaré solo un caso a modo de ejemplo, mucho se habló (y quizá se siga hablando por otro buen tiempo), en estos últimos días del caso de la ex Intendenta de la VIII región, Jacqueline Van Rysselberghe, una mujer de muy buena presencia, medico Psiquiatra, casada, con varios hijos a cuesta y que goza de una buena situación económica, con todos estos datos podríamos pensar que esta destacada mujer, debería tener una vida plena y gozar de una rica familia. Dicho esto, me saltan numerosas dudas que día a día suelo descubrir en las personas de esta lastimosa sociedad, que busca el hombre o la mujer para sentirse satisfecho, que buscan las personas para vivir verdaderamente felices, puse de ejemplo a esta conocida mujer del ámbito político, solamente para enmarañar mis pensamientos, pero los casos son diversos y extraños, cuando tenemos en nuestras manos la felicidad, pareciera que se nos enturbiara la vida, pareciera que no viéramos cuan grandiosa es la existencia de los seres queridos, - en una afirmación de esta hermosa damisela, días atrás, la escuché decir, e sacrificado mucho mi vida privada, pobre mis hijos-, ¡por favor!, de que estamos hablando, quien exige, quien presiona, quien obliga a esta pobre mujer a tener que estar sometida a tan grandes esfuerzos para que no pueda vivir con todo lo que la vida le a entregado, tenerlo todo pareciera ser el anhelo de muchos, pero que es todo, -que nos sobre el dinero, gozar de buena salud, tener éxito profesional, ser reconocido en el medio social, jactarse de poseer una gran red de supuestos amigos, ser el o la seducción sexual con quien o quienes corresponda-, en fin, podría seguir enumerando miles de factores por los cuales los seres de esta sociedad se pueden jactar de tener felicidad, o quizás de buscar la felicidad. Mi parecer apunta a que la insatisfacción es cada día mas grande, nos sentimos insatisfechos con todo y no agradecemos lo que tenemos a nuestro lado, podemos tener a dos centímetros la felicidad y ya no sabemos reconocerla, poco o mucho es un termino que para la felicidad del ser humano, no indica el valor de lo que es verdaderamente importante, yo soy un defensor de la familia, aquella que se sustenta en un hombre, una mujer y sus descendientes, creo que en la actualidad muchos pierden la perspectiva de lo que es importante para la verdadera felicidad de un hombre y una mujer, como podemos pretender ser felices si un valor fundamental en la vida de esta tierra, se deja cada día mas de lado, no argumentemos con elementos de tan bajo perfil, las ilusas justificaciones para las actitudes que tomamos ante la vida, los valores que tienen las pequeñas o grandes cosas dependen fundamentalmente de lo que cada uno de nosotros logremos ver, la felicidad puede estar a nuestro lado, pero si somos ignorantes de nuestras propias verdades, jamás podremos dar con esa puerta que solo esta junta, nunca cerrada.
Adonis Palomar