LOS CAMINOS DE LA VIDA

Por mas que repaso las distintas facetas de la vida, por mas que pienso en cuanto debemos andar por este largo e inexacto camino que se interna por la vida de cada individuo, me cuesta dar con el paso adecuado para poder llegar a casa, llegar a esa morada que un día soñamos, esa estadía donde debiéramos dejar caer nuestra paz, ese camino que nos debiera llevar a detenernos en el pensamiento diario, ese camino que en cada momento de nuestra desesperanza nos conduzca a la complacencia de la cordura, desmesuradamente, caprichosamente, cadenciosamente, con incitación prematura, con sensación candente, con todo aquello que necesitamos para amarnos y amar esa senda de nuestra vida y la de los demás, ese es el camino que buscamos incesantemente, con fulgor de la llama luminosa, de la braza candente, del amasijo del alimento maternal, todo eso que atraviesa el pensamiento del caminante, ¿somos mas, somos eso?, que mas da, buscamos y rebuscamos, escarbamos y seguimos escarbando, con la pala y el azadón, con la mano y el corazón, con todo lo que pueda servir, para que el paso se asegure de llegar, pausa del alma y de los sentidos, pensamiento de un viejo amigo, aquel que pareciera saber de la vida, aquel que pareciera conocer al hombre y a la mujer, aquel que caminó entre tu y yo, aquel que caminó humildemente entre todos los seres, errante del camino de la vida, ese que un día sin querer, comentó sobre los pasos que debemos seguir, sus palabras fluyen con sentido y con razón, con verdad y con simpleza, ese es el camino, indicó,
EL CAMINO QUE LLEVA A LA VERDAD, SIEMPRE PASA POR EL CAMINO DE LA MENTIRA Y LOS ERRORES HUMANOS, EL CAMINO QUE LLEVA A LA ALEGRIA, SIEMPRE PASA POR CAMINO DEL DOLOR, EL CAMINO QUE LLEVA A LA FELICIDAD, SIEMPRE PASA POR EL CAMINO DE LA TRISTEZA, EL CAMINO QUE LLEVA A LA LUZ, SIEMPRE PASA POR EL CAMINO DE LA OSCURIDAD.
Paso a paso el camino se debe hacer, paso a paso debemos seguir, tal vez un día, sin darnos cuenta, estaremos en el camino que el amigo un día nos vino a mostrar.
Adonis Palomar.