martes, 16 de agosto de 2011

COSAS LOCAS MUY RAZONABLES


En muchas oportunidades, como me gustaría renunciar a tantas cosas de esta necia realidad, a usted no le gustaría en instantes mandar todo al diablo, no le gustaría ser capaz de renunciar a todas sus pertenencias y ganar ese tiempo que se pierde en defenderlas, acaso no le gustaría pasar por un puente de luces y dulces doncellas, no le gustaría no ir mañana a trabajar y hacer lo que más le gusta, así es un día de plena independencia, como mandar un secreto a ese príncipe que un día soñaste, dar un paso y sacar un conejo del viejo sombrero, ser feliz como cabro chico que sale de la escuela, tomar un cálido café con la vida, ver como ella se suelta el pelo y me invita a caminar por la escena, de vez en cuando la vida se puede brindar en cueros, no siempre tener que caminar de puntillas, para no despertar los malos sueños, cuando la llama se apaga, la volvemos a prender, que posibilidad tenemos de alborotar el barrio, en el sube y baja de la vida, no se sorprenda si la luna le hace un guiño, a ti, si, a ti, no te han dado ganas de tomar un bus y bajarte al final de la parada, no te gustaría ser un simple vagabundo, ir y venir por caminos de piedra y ser un simple titiritero, no te gustaría hacer el amor a puertas cerradas y luego dormir hasta que te despierte el olor a tostadas calientes, querer bajar una estrella y ponerla frente a tu ventanal, esa que alumbre tu cuello y el lujurioso cuerpo de ella, si, que dulces olvidos de sombras de realidad, te acuestas entre mi almohada y mi soledad, no me he olvidado de que me cae bien este mundo, solo que lo distinto y audaz de pronto me estimula, todos tenemos curiosidad por el que ama a quien tiene que amar, probablemente todo tiene que ser verdad, caminar en dirección ascendente en bajada, ocultar negras intenciones, con gran naturalidad coleccionaremos un gran arsenal de cosas que no tienen repuesto, que gran necedad esta realidad, volvernos locos por unos instantes, agarrarnos de los pelos con sofisticados diálogos que garanticen las premisas mínimas, ser un punto de partida en la vida diaria, un hermoso futuro de amor y paz, vida doble de cosas locas razonables, un tango y un concierto en medio de la guerra y la paz, pasos negros que nublan la verdad y envenenan, rumbos perdidos que parecen notas melodiosas en medio de tinieblas de algodón, caricias suaves, papel de lija, locura necesaria en un mundo que te empuja a correr, por la mañana o por la noche, campanillas que te remecen el alma y te vuelven a enjuiciar, mujer de muchos huesos, deshojas una margarita y encantas con tus letras, como me gustaría decirte que no eres lo que crees ser, te miro alisarte el pelo, te abrochas la falda, te vas sin un reproche, así me perderás por la noche, caminar por donde no se puede caminar, sin mirar el umbral de mi puerta, se borrará la última huella que queda de la oscura neblina, como hacer por momentos esas cosas que la niña sueña en casa, el reloj se detiene a las diez y el mundo sigue su caminar, por montes sin sentir, sin sentirte a ti, el camino se hace en el valle, me engancha la noche en medio de corazones perezosos, con polvareda de otra gente, tengo tanto para contar, en medio de mangos y papayas, tantas imaginaciones que se resbalan por sentarme a oír lo que el viejo cuenta, poner rumbo al norte, ansioso por llegar a ver lo que tiene el mundo en ese lado, donde nacen las leyendas, las estrellas en el firmamento, soñando con el caminar profundo, ese viejo perro a mi lado, cuanto más de prisa voy más cerca estoy del arco iris, eso puede ser el nuevo despertar, cosas locas muy razonables, dentro de tu vientre, confuso despertar y postrero juego de media tarde, como me gustaría lo que a ti te guste, como me gustaría que a todos les guste lo que tiene que gustarle, en el boliche de esta esquina, estas sin poner la mesa, es hora de florecer la nueva hierva, hombre que vienes del mar, mujer que bajas llena de sombra, esas exóticas siluetas que anhelamos por doquier, sueños de héroes y villanos, besos llenos de besos, se escapan entre bambalinas las sombras de sueños que ideamos como niños, cosas locas muy locas, esa vida que viene del sur, cerca de lo que siempre queremos y no nos atrevemos a querer, eso quisiera hoy, tal vez mañana sea igual, pero no es hoy, manos con sueños, manos con locura verdadera, eso quisiera, ¿no lo quisieras tú también?, no existe senda sin perfume lleno de aromas que valen tres pesos, galopes en un potrillo, olvidemos un segundo esa mentira de una vida que te da solo dos boletos, un par de vueltas y alucinaremos como si fueran cosas locas, locas muy verdaderas, en medio de un mal de amores, están los kilómetros de enjambres de necedades irreales, aún conservo un par de gramos de esperanzas de mi niñez, están aliñadas con sendas porciones de ilusiones de mi vida diaria, saltan chispas que encrespan los pelos, escribo para ofrecer a quien quiera vivir en una caracola, en un zapato o en un viejo barco, sueños que viajan en un tren que se pasea entre varias estaciones, perdido en el tiempo se detiene de ves en cuando en la parada de la realidad, vivimos un poco más y volvemos a emprender el viaje entre matorrales de sinceridad y montes de locuras de vida de verdad, eso quisiera, por instantes eso quisiera de verdad, cosas locas muy cuerdas, cosas locas de verdad.
Adonis Palomar

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